Marta Barjola
Actualizado el 14/11/2023 a las 13:40
Aunque debemos usar protección solar todo el año, es en verano cuando se dispara el consumo de protectores solares. Si todavía no has comprado uno, te vamos dar una pautas para que puedas comprarte el mejor protector solar que se adecue a tus necesidades.
Temas que se tratan en esta publicación:
Elije un buen grado de protección solar o SPF
Saber que número de SPF es el más adecuado para nosotros puede ser algo complicado porque hay mucho desconocimiento y mitos en torno a que se refiere este indicativo.
“SPF” es un valor que indica el “factor de protección solar” (Sun Protection Factor)de un protector solar, o lo que es lo mismo, es un valor que mide el grado de eficacia de bloqueo de los rayos UVB.
Ten en cuenta que la protección no aumenta proporcionalmente, una crema de protección solar con un SPF 60 no es dos veces mejor que SPF 30.
Un protector con un SPF 15 bloquea aproximadamente el 94% de los rayos UVB, uno de SPF 30 bloquea aproximadamente el 97% y uno con SPF de 50 bloquea aproximadamente el 98%. Ningún protector solar bloquea el 100% de los rayos UVB.
La Academia Estadounidense de Dermatología recomienda un SPF de 30 o más. La diferencia de protección entre dos cremas con SPF extremadamente altos a menudo es insignificante y no vale la pena asumir ese el dinero extra.
Además, hay factores que producen variaciones en torno al grado de eficacia del protector, como puede ser el tipo de actividad que estemos desarrollando y del grado de intensidad del sol en el momento de la exposición.
Como hay gente con diferentes tipos de pieles, podemos establecer esta regla básica para comprar un protector solar en función de nuestro tipo de piel:
- Protector solar para niños pequeños o gente con piel blanca o muy blanca: SPF 50
- Protector solar para pieles normales: SPF 40
- Protector solar para pieles morenas: SPF 30
Recuerda que no sólo debemos protegernos de la radiación UVB, sino también de los rayos UVA, que son los que producen el envegecimiento prematuro, arrugas y manchas.
Si quieres tener protección completa, te recomendamos que elijas uno de “amplio espectro”, que indique específicamente la cobertura de estos dos tipos de radiación.
Busca un protector solar resistente al agua
Como hace calor y el cuerpo utiliza la piel para refrigerarnos de forma natural. Este sistema hace que se expulse agua a través de nuestros poros o lo que comunmente llamamos como sudor.
Como además suele coincidir que en estos periodos de calor aprovechemos para refrescarnos ya sea en la playa o en una piscina, deberemos buscar un protector solar resistente al agua.
Ahora bien, tenemos que saber que ningún protector solar es “100% resistente al agua o al sudor”. Incluso con un protector solar que indique en etiquetado que es resistente al agua, intenta reducir el tiempo entre las aplicaciones de crema solar a 40 minutos o una hora.
Elige el formato de protector solar que más te guste
En el mercado podemos encontrar diferentes formatos de protector solar y al final dependerá de los gustos de cada uno de cara a elegir el mejor protector solar.
Hay quien prefiere comprar un protector solar en formato de aerosol o spray, mientras que otros que prefieren geles o cremas más espesas.
Independientemente de lo que decidas, asegúrate de que cuando sea el momento de aplicarte, lo hagas de forma abundante y uniforme.
La aplicación es tan importante como el grado de SPF: si te aplicas el protector correctamente, este no hará bien su función.
Te recomendamos el formato de aerosol, sobre todo si eres de piel grasa, y las cremas si eres de piel seca.
Si eres una de esas personas que son propensas a tener acné, ten cuidado al seleccionar un protector solar, céntrate en buscar uno especial para la cara, los basados en óxido de zinc tienden a funcionar mejor. Por lo general hay cremas específicas para este tipo de pieles, pregúntale a tu dermatólogo, el te podrá recomendar uno que se adapte a tu tipo de piel.
Ten cuidado con las alérgicas al elegir un protector solar
Este punto lo hemos creado pensando en aquellas personas con pieles muy sensibles, alérgicas o con cierto grado de sensibilidad química. Si este es tu caso, puedes utilizar los protectores de prueba para ponerte una pequeña muestra alrededor de la muñeca. Si observas alguna reacción alérgica o que te da algún problema en la piel, descarta directamente ese protector y opta por uno diferente. Puedes repetir esto hasta que encuentres uno que no te afecte o hablar diréctamente con tu médico sobre las marcas más recomendadas a tu caso.
Si ya te has comprado uno y notas que te da picor, enrojecimiento, ardor o en el peor de los casos, te produce sarpullido o ampollas, puedes estar bajo los síntomas de una reacción alérgica. Entre los componentes que causan menores problemas suelen ser el dióxido de titanio y el óxido de zinc.
Comprueba la fecha de vencimiento del protector solar
Suele ocurrir que cada verano nos sobra parte del contenido del último protector solar que compramos el año atenrior. De cara a usar ese protector solar del año pasado o utilizar uno anterior, evita aquellos con más de 3 años desde su fecha de fabricación y comprueba siempre las fechas de caducidad. Si este ya ha caducado, no te lo pienses, tira el bote viejo y compra un protector solar nuevo.
Como por lo general metemos los protectores en los bolsos o mochilas y estos los dejamos junto a las toallas o incluso expuestos directamente al sol en el peor de los casos, suelen verse afectados por temperaturas excesivamente altas. Si percibes cambios evidentes en el protector, colores y texturas poco uniformes, es señal de que ese producto no va a ofrecerte garantías y es mejor que compres otro.
Con estas recomendaciones, ya lo sabes todo para comprar un buen protector solar. Si quieres ampliar información sobre el tema de la protección solar puedes ver nuestra guía sobre como ponerte crema solar correctamente o 13 sitios donde la gente suele olvidarse de ponerse el protector solar.
