¿Qué debes hacer antes de vender tu coche usado?

Marta Barjola

Actualizado el 14/11/2023 a las 14:37

El mercado de la compra/venta de coches está resurgiendo de sus cenizas como por arte de magia. La situación económica va mejorando poco a poco y muchos se animarán a sustituir su coche por otro más nuevo y sobre todo más ecológico. Si estas pensando precisamente esto, debes tener en cuenta que el aspecto tanto interior como exterior del coche influye directamente en el precio de tasación que te ofrezca.

1. Mejorar el aspecto exterior

Al igual que en una entrevista de trabajo, la primera imagen cuenta y mucho. Por eso, es de gran importancia que mejores al máximo el aspecto exterior de tu vehículo. En primer lugar, es preciso que hagas una visita al lavadero. La mejor opción es un lavado a presión o directamente al túnel de lavado. Recuerda que en ambos casos la parte de los bajos no queda limpia, por lo que te tocará repasarla a mano. ¿Cómo hacerlo? Muy fácil:

• Empecemos con las llantas. Al ser las que están más en contacto con el suelo (junto con las ruedas, obviamente) son las que más suciedad retienen. Conviene prestar especial atención a todos y cada uno de los recovecos con el objetivo de que todo quede limpio por igual. Para limpiarlas, existen productos especiales, aunque si lo prefieres la esponja y el jabón también son buenos aliados. Si estás pensando cambiar las ruedas para darle más valor a tu vehículo, aprovecha y limpia la zona que queda limpia una vez retiradas.
• El estado de los faros delanteros es otro de los puntos más importantes a tratar. Como habrás podido comprobar, con el paso de los años el aspecto de los aros se va deteriorando debido principalmente al sol y el paso del tiempo. Pero no te preocupes, existen productos que los ponen como nuevos en un abrir y cerrar de ojos. Lo mejor es aplicar pulimento y cera y frotar hasta conseguir el resultado deseado. Si en ese momento descubres que alguna de las tulipas está rota, acude a un taller las encontrarás a buen precio.
• El estado de las matrículas (tanto delantera como trasera) también es importante. Comprueba que ninguno de los caracteres está dañado y que por lo tanto se encuentra en perfectas condiciones. Presta atención a su limpieza y a su estado.
• Por ultimo, centra tu atención en el logotipo. En caso de que te lo hayan robado o similares, opta or un ir a un desguace y posteriormente a un taller para que vuelvan a ponerlo en su sitio.

2. El interior también importa

Como en la vida misma, el exterior no lo es todo. Por eso, si de verdad quieres impresionar el interior también debe estar como los chorros del oro. Tienes que eliminar toda prueba que demuestre que has pasado por allí. Esto quiere decir que adiós a toda la publicidad que tengas en el coche, a tus CD’s del año de la tos, los colgantes del retrovisor… De este modo, tu coche parecerá que acaba de salir del concesionario y el comprador se sentirá como si el fuera el primer propietario.

Cuando te hayas librado de todos esos detalles empieza la limpieza en profundidad. Coge el aspirador y comienza a repasar los asientos traseros (que no se te escape ningún hueco). Continúa con los asientos delanteros y comprueba que todas las alfombrillas han quedado como nuevas. Las migas del bocadillo que te comiste el otro día no puede quedar como prueba del delito en el momento de la compra. Tampoco olvides sacudir los asientos con golpes suaves. De este modo, el polvo se irá.

Por último, armado con trapo limpia polvo y spray, es momento de limpiar el salpicadero y los plásticos que lo recubren, así como, las palancas y los mangos de todas las puertas. Te recomendamos que uses algún producto especial, ya que el famoso “agua y jabón” deja un acabado un tanto mejorable, aunque decente. Por ultimo, pero no por ello menos importante, limpia el maletero. Es la zona más complicada ya que en muchas ocasiones se convierte en el trastero perfecto, pero es importante que el futuro propietario no se encuentre sorpresas en el cuando se lo estés enseñando.

3. Busca pruebas de que tu coche esta perfecto.

Ahora que ya has dejado limpio como una patena tu vehículo es hora de demostrarlo con papeles. Aunque la apariencia influirá ( y mucho) en la opinión del comprador, es necesario tener los documentos que avalan el buen estado del coche. Por eso, es hora de ponerse manos a la obra y recopilar todos los papeles que verifican el buen estado del vehículo. Asegúrate de recopilar cronológicamente todas las facturas y recibos que demuestran que has llevado a cabo las revisiones pertinentes. Tampoco te olvides de los cambios de aceite, de ruedas, de pastillas de freno… Tampoco está de más que compruebes que tienes todos los documentos para transferir el coche en regla. ¿Cuáles son?:

• El documento que acredita que la ITV ha sido pasada correctamente.
• El permiso de circulación
• El recibo del último impuesto de circulación.

4. No te conformes, busca más pruebas

Los documentos que te hemos mencionado anteriormente son importantes, pero también lo son contar con opiniones externas. Su utilidad es similar a la de las cartas de recomendación en el trabajo, por lo que presta atención.

En primer lugar hay productos que acreditan el perfecto estado del vehículo de ocasión. El nombre de este es Garantía sellada y cubre las principales averías durante un año. Como puedes imaginarte, este sello facilita la compra-venta de los vehículos ya que:

• Acredita que ha pasado una revisión exhaustiva en un taller.
• Que dispone de una cobertura de Garantía Mecánica.

Esta garantía, cubrirá durante un año cualquier avería que este relacionada con la caja de cambios, con el bloque de motor, la culata, la bomba inyectora y el modulo electrónico principal. 

Si conoces más consejos para preparar tu coche para una venta, solo tienes que ponerlo en comentarios.