Jose Romero
Actualizado el 26/01/2020 a las 12:55
Malasia es un país del sudeste asiático que satisfará las expectativas de aventureros, playeros y urbanitas a lo largo y ancho de su superficie: su aleación de culturas y sus vibrantes paisajes abarcan todo lo deseable en un viaje al otro lado del mundo.
Aunque su extensión es pequeña comparada con otros importantes países del continente, Malasia tiene una geografía espectacular que nada tiene que envidiar a ningún otro enclave del mundo. Y es que cuando hablamos del país malayo, no solo hacemos referencia a la porción continental que linda con Tailandia y Singapur, sino también al norte de la mágica isla de Borneo, la cual comparte con Brunei e Indonesia.
Se trata del quinto país más visitado de todo el continente asiático, por lo que pocas dudas quedan de que se trata de un país de obligado tránsito en caso de viajar por la zona. No obstante, el hecho de que esté tan lejos y que sea un país tan diferente a veces puede abrumarnos un poco a la hora de dibujar una hoja de ruta.
Eso sí, con esta sencilla guía, podrás tener siempre claro qué ver y qué hacer cuando viajes a Malasia.
Temas que se tratan en esta publicación:
¿Cómo viajar a Malasia desde España?
Malasia se encuentra a 11.000 kilómetros de nuestro país, por lo que el avión es la única opción rápida. Afortunadamente, son varias las compañías que realizan el trayecto a diario, por lo que podrás elegir entre multitud de posibilidades. Estas son algunas de las más habituales:
- British Airways.
- Etihad Airways.
- KLM.
- Qatar Airways.
- Emirates.
Lo más frecuente es que las salidas desde España tengan lugar desde Madrid o Barcelona y hagan una escala en alguna ciudad de Oriente Medio para dividir el viaje en tramos de unas 7 horas cada uno, aunque también es posible hacer el cambio en algún punto de Europa, como Amsterdam.
En cuanto a los aeropuertos de destino, es posible llegar en avión hasta los de Kota Kinabalu (Sabah), George Town (Penang), o a la capital en el de Kuala Lumpur. Este último es internacional y cuenta con unas dimensiones que, a tu vuelta, te obligarán al llegar con antelación, sobre todo si tu vuelo coincide con las horas punta de tráfico.
¿Y el visado?
Con el convenio de supresión de visados hispano-malayo, desde 1995 los ciudadanos españoles pueden viajar a Malasia sin visado, por un tiempo máximo de 3 meses. Para ello, tan solo es necesario un pasaporte válido, aunque sí es importante que sea con una validez de al menos 6 meses.
Algunos aeropuertos no tienen puestos de inmigración señalizados, por lo que es importante que te asegures de conocer dónde puedes obtener tu sello de entrada antes de salir de la terminal de llegadas. Del mismo modo, algunos aeropuertos pequeños que solo albergan vuelos internos ni siquiera cuentan con puesto de inmigración; por ello, es importante que si vuelas a Malasia e inmediatamente y sin salir del aeropuerto vas a tomar un vuelo interno, solicites tu sello en el primer aeropuerto.
Este es el caso también del estado de Sabah, para el que el Ministerio de Exteriores recomienda fervientemente que compruebes que tu pasaporte obtiene el sello de entrada al llegar al país. De lo contrario, corres el riesgo de ser detenido por incumplimiento de las leyes de inmigración hasta 14 días, tiempo en el que las autoridades investigan el caso.
Por otro lado, en los puntos de control de pasaportes, las autoridades malayas te solicitarán tus datos biométricos (huellas dactilares) tanto al entrar como al salir del país.
¿Cómo desplazarse por Malasia?
Como podrás imaginar, la Malasia peninsular cuenta con más opciones que la Malasia insular, mucho más natural y salvaje. La primera es la más poblada y, por tanto, posee una mayor infraestructura de transporte en general.
Viajar en tren por Malasia
Solo en la parte emplazada en el continente, existen más de 1.800 kilómetros de vías. Malasia cuenta con una arteria que forma la línea de lujo que une a Singapur con Tailandia, por lo que todo el país está atravesado por raíles de tren.
El servicio de tren opera bajo la compañía Keretapi Tanah Melayu (KTMB), cuyo epicentro se encuentra en la Sentral Train Station de Kuala Lumpur.
Esta compañía oferta dos tipos de trenes: unos exprés, con todo tipo de comodidades como aire acondicionado y servicios nocturnos, y los locales, de clase económica y mayores duraciones de trayecto al realizar más paradas en cada viaje.
En el caso de la Malasia insular, existe una línea circular de unas 4 horas de viaje que incluye una excursión turística a Sabah desde Kinabalu a Papar, la comida y una parada en Kinarut.
Viajar en autobús por Malasia
El autobús es uno de los transportes más populares del país, siendo muy utilizado por locales y turistas. Son muchas las opciones de larga distancia que recorren todo Malasia e, incluso, alcanzan los países vecinos.
Eso sí, algunas compañías pueden ofrecer viajes muy lentos y largos y no contar con algunas comodidades como el aire acondicionado. Otras de un precio algo mayor suelen contar con mejoras e incluso servicio de comidas, por lo que cabe pensárselo dos veces antes de elegir la opción más barata.
Alquilar un coche en Malasia
Coger un coche de alquiler es relativamente fácil en Malasia, particularmente en las ciudades grandes como Kuala Lumpur. Las principales compañías son las conocidas Avis y Hertz, aunque también es posible encontrar otras como Mayflower y Orix. En ciudades más pequeñas, donde lo habitual es realizar trayectos por los alrededores, lo más frecuente será encontrar alquiler de motos y scooters.
En la mayoría de establecimientos aceptarán el carné de conducir europeo, aunque es posible que algunos requieran el permiso internacional, por lo que conviene que nos informemos de antemano, incluso antes de viajar.
Además, es importante saber que en Malasia se conduce por la izquierda, como en el Reino Unido y al revés que en España.
Si bien las principales carreteras de peaje suelen estar en muy buen estado, las nacionales son las más usadas por los locales, por lo que suele haber más tráfico en estas últimas. En el interior, es posible encontrar estas carreteras con curvas muy pronunciadas que hacen necesario el continuo uso del claxon para avisar a los que vienen de frente.
El uso del cinturón es obligatorio.
¿Qué ver obligatoriamente en Malasia?
1. La capital: Kuala Lumpur
La principal ciudad del país malayo te inspirará nada más salir de su aeropuerto, con su gente, su ambiente cálido y sus olores.
Kuala Lumpur está repleta de cosas por ver y hacer. La plaza Merdeka, la plaza de la Independencia, la Mezquita nacional (a la que se puede acceder si vas con el atuendo debido), y la antigua estación, de aires coloniales británicos, son algunas de las atracciones turísticas que no te debes perder.
Para comer y empaparte de una de las principales culturas del país, acércate a Chinatown. Sus múltiples puestos de imitaciones, de comida y de artículos baratos harán que se te pasen las horas volando.
Y cuando cae el sol, acércate a las torres Petronas, aunque hazlo con este pequeño consejo: allí, a estos dos rascacielos que hasta hace poco comandaban el cielo del mundo, los malayos las conocen como las Twin Towers, sin ninguna referencia a la compañía petrolífera. Visita su centro comercial y coge comida para llevar en su zona de restauración para sentarte en el pequeño jardín de detrás. Así, podrás disfrutar de los juegos de luces, tanto en el cuerpo de los edificios, como en el pequeño lago artificial que baña el suelo de alrededor.
2. Los campos de té en Cameron Highlands
Uno de los principales motores económicos del país malayo es la producción de té. Por ello, una visita breve a Cameron Highlands es de obligado cumplimiento para cualquier amante de esta bebida. También lo es para cualquiera que desee descansar de las altas temperaturas de la capital o del país en general, ya que es uno de los puntos más altos y, por tanto, fríos de Malasia.
En Cameron Highlands, son muchas las compañías que operan ofreciendo tours en jeep por las plantaciones.
3. Taman Negara
Se trata de un parque nacional cuya selva es de las más antiguas del mundo. Es por ello que llegar hasta aquí puede llegar a significar un espectacular viaje en bote por el río que la encierra.
La organización que lo protege exige abonar una licencia simbólica para la toma de fotos dentro del parque, que se puede pagar en la mayoría de agencias de viajes. A cambio, te entregarán un pequeño papel que deberás llevar en todo momento contigo en todo momento en el que te encuentres dentro de la selva, con independencia de que vayas en una excursión organizada por alguna de las empresas de Taman Negara.
Una de las opciones que podrás adquirir estando allí es la de pernoctar dentro del parque, en alguna de las cuevas que se esconden entre su maleza. Con suerte, además, podrás ver algún animal, aunque puede llegar a ser difícil.
Riesgos de viajar a Malasia
Los principales peligros a los que se expone un turista en Malasia son los hurtos y las riadas. Los robos y atracos con violencia suelen ser bastante infrecuentes, aunque siempre es recomendable no transitar por lugares solitarios de noche como en cualquier lado.
Además, las zonas de Sabah y las islas más próximas al sur de Filipinas sí pueden ser algo más inseguras que el resto del país, por lo que suele recomendarse evitarlas a menos que sea estrictamente necesario.
Es importante saber que en Malasia las drogas están muy mal vistas y altamente castigadas: por posesión y uso de drogas, la pena puede ascender a una multa, azotes con vara y hasta un máximo de 20 años de prisión.
También están castigadas las relaciones entre personas del mismo sexo.
Por último, también está castigada cualquier acción que se considere “comportamiento indecente”, por lo que es recomendable evitar muestras excesivas de amor en público, actitudes incívicas e irrespetuosas, participar en manifestaciones…
Esperamos que esta guía te ayude en tu viaje a Malasia. Disfruta de este maravilloso país del sudeste asiático y empápate de su naturaleza única en el mundo.
